3 Cosas para ser bueno - Parashá Vayera

22.10.2018

Vayera "Y apareció", esta parashá se encuentra en libro de Génesis 18:1-22:24 e inicia con el anuncio del nacimiento de Isaac: "Le preguntaron a él: "¿Dónde está tu esposa Sará?", y él respondió: "Ahí, en la tienda". Entonces dijo [uno de los tres ángeles]: "Volveré a ti [el próximo año] para esta fecha. Y Tu esposa Sará tendrá un hijo" [el ángel le augura a Abraham el nacimiento de su hijo Itzjak, que tendría lugar en Pesaj del año siguiente.] Sará estaba escuchando detrás de la puerta de la tienda, que estaba detrás de él [detrás del ángel]. [Génesis 18:9-10]. También en esta parashá, HaShem [D-os] le cuenta a Abraham el juicio que se avecina sobre Sodoma y Gomorra: "Dijo Hashem: "¿¡Cómo he de ocultar a Abraham lo que he de hacer!?" [Génesis 18:17]. Lot es salvado junto con sus hijas del juicio de Sodoma y Gomorra [Génesis 19.21-22], Avimelej intenta tomar a Sara [Génesis 20:3]. Nace Isaac [Génesis 21:1]. Hagar e Ismael son expulsados [Génesis 21:9]. Abraham y Avimelej hacen un pacto [Génesis 21.23]. y finaliza con la prueba de fe más grande a la que Abraham pudo ser sometido: ofrecer en sacrificio a su hijo Isaac [Génesis 22:2].

Es una parashá llena de grandes acontecimientos, de todos quisiéramos hacer referencia para resaltar la importancia de hacer lo que ¡El Señor espera que tú y yo hagamos! Porque está escrito: "¡Ya se te ha declarado lo que es bueno! Ya se te ha dicho lo que de ti espera el Señor: Practicar la justicia, amar la misericordia, y humillarte ante tu Dios" [Miqueas 6:8]

Si quisiéramos tener un ejemplo claro acerca de practicar la justicia, amar la misericordia y humillarnos ante Elohim, esta es la parashá, veamos porque:

  • Practicar la justicia: Sobre esto está escrito que Abraham amaba ser hospitalario, eran un excelente y gran anfitrión, tanto que a pesar de que estaba recién circuncidado él se sentó a la entrada de la tienda con el anhelo de poder tener invitados a los cuales bendecir: "Hashem se le reveló [a Abraham] en las planicies de Mamré, estando él sentado a la entrada de la tienda, al calor del día. [Este era el tercer día de la circuncisión, y a pesar de su dolor y del calor sofocante, Abraham estaba allí sentado procurando invitar huéspedes a su casa, como siempre lo hacía - era la bondad en esencia. Hashem hizo que fuera un día sumamente caluroso para que la gente no saliera al desierto y así evitarle a Abraham la molestia de atenderlos, pues estaba muy dolorido por la circuncisión. Pero cuando Hashem notó que Abraham estaba más afligido por no haber gente a la que atender que por su dolor físico, envió a los tres ángeles para que los recibiera y se sintiera a gusto]. Alzó sus ojos y vio que tres hombres estaban parados frente a él. Cuando los vio, corrió a su encuentro desde la puerta de su tienda, se inclinó hacia la tierra y dijo "¡Señores míos!", [y luego, dirigiéndose al líder de ellos, dijo: "señor mío"], si he hallado gracia a tus ojos, por favor [quédate aquí,] no pases sobre tu sirviente. [Génesis 18:1-4] a
  • Amar la misericordia: Abraham amo la misericordia, cuando HaShem le revelo el juicio que vendría sobre Sodoma y Gomorra El no dudo en interceder por ellos aun sabiendo que la sentencia era merecida: Abraham se acercó y dijo: "¿¡Así que destruirás al justo con el malvado!? Quizás haya 50 justos dentro de la ciudad, ¿igualmente la destruirías y no perdonarías al lugar en virtud de los 50 justos que pudiera haber allí? ¡Sería sacrilegio para Ti hacer una cosa como ésta, que hagas morir al justo con el malvado y que el justo sea tratado como el malvado! ¡Sería sacrilegio para Ti! ¿¡Acaso el Juez de toda la tierra no ha de hacer justicia!?" Dijo Hashem: "Si hallase en Sedom 50 virtuosos dentro de la ciudad, perdonaré a todo el lugar por ellos." [Génesis 18:23-26] a

Cuando Avimelej quiso tomar a Sara para sí, le sobrevino a él y a su pueblo una plaga y a sus mujeres les fueron cerradas sus matrices, Abraham amo la misericordia y a pesar de su afrenta intercedió por ellos: "Entonces oró Abraham a Elohim y Elohim sanó a Avimélej, a su mujer y a sus criadas. Y dieron a luz. Pues previamente Hashem había cerrado toda matriz de la casa de Avimélej, a pedido de Sará, esposa de Abraham." [Génesis 20:17-18] a

  • Humillarnos ante Elohim: Nuestra inclinación al mal siempre nos hace creernos súper sabios, y por eso llegamos a cometer tantos errores. Abraham aprendió a obedecer y a creerle a nuestro hermoso Abba [Padre], aun a pesar de lo difícil de las circunstancias, él obedeció dos difíciles instrucciones (una más dura que la otra), y en ambas fue humilde y se humilló ante Elohim, pues sabia en quien estaba puesta su confianza.

La primera instrucción que recibió fue: "Y le dijo a Abraham: "Echa a esta sirvienta y a su hijo, pues el hijo de esa sirvienta no heredará junto con mi hijo, con Itzjak." Esa cuestión [de su hijo Ishmael que se había descarriado] disgustó mucho a Abraham. Dijo entonces Elohim a Abraham: "No estés apenado por el muchacho y tu sirvienta [que debes expulsarlos]: todo lo que te diga Sará préstale atención pues [sólo] tu descendencia [vía] Itzjak será considerada tuya. [Génesis 21:10-12]

La segunda instrucción fue: "Y Dios le ordenó: -Toma a tu hijo, el único que tienes y al que tanto amas, y ve a la región de Moría. Una vez allí, ofrécelo como holocausto en el monte que yo te indicaré. [Génesis 22:2] b

Si, podemos decir que en esta parashá encontramos el cómo podemos hacer lo que El Señor ya nos ha declarado que es bueno y espera de nosotros. Así que querido lector, es el anhelo de nuestro corazón que todos podamos seguir el ejemplo de Abraham, practicar la justicia, amar la misericordia y humillarnos ante nuestro Elohim, para que así seamos hallados dignos delante del Rey de reyes y Señor de Señores.

¡Que así sea su voluntad!, ¡Shavua tov!

REFERENCIAS:

a: Tora emet

b: Biblia nueva versión internacional

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